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jueves, 13 de febrero de 2014

Un motor ...

Este es el motor que llevaba nuestro Vespino. Se trata de un "Tipo F9", llamado así porque se empezó a montar con la serie F9, a mediados de los 90 (y porqué suele constar en la documentación). Una puesta al dia de Moto Vespa para poder competir con las Peugeots Rápido, Hondas Vision, etc. y sobretoto el depredador del momento: La Yamaja Jog.
Básicamente se trata del mismo esquema de motor con casi todas las piezas un poco renovadas, sin apartarse del esquema original.



Hasta ahora hemos usado para todos los proyectos el motor clásico. Ahora vamos a ver que podemos hacer con este. Como características proncipales están su nuevo cilindro de 6 transferts con culata reforzada, el encendido propio de Piaggio, variador similar con menos piezas y unido al cigueñal mediante el estriado de un nuevo cigueñal mas reforzado, una transmisión mas corta y con tarado de muelles diferente.
Casi todo igual, pero algo diferente.
Básicamente se diferencia del antiguo porque a diferencia de este, que lleva los tornillos de media vuelta de la tapa de la correa iguales y simétricos, el nuevo, tiene el delantero situado bastante mas alto.
Vamos quitando las tapas de un  motor bastante sucio. De momento lo desmontaremos sin limpiar.




Empezamos por el cilindro (ya suelto), y el encendido, que parece en buen estado, pero con una aspa de la turbina de plástico rota.




El carter largo denota mucha suciedad por pérdidas a nivel de retenes. El clip de la cadena estaba montada al revés de lo recomendable.



Aquí ya le hemos retirado el sistema de pedalier.



Ahora le toca el turno al piñonaje del reductor. Siempre se suele poner una bandeja para recoger el aceite que cae al abrir, ya que no tiene sumidero. En este caso resulto inútil, ya que no cayó ni gota.




Vamos a separar el cárter. Primero soltamos los 5 tornillos y depués calentamos el alojamiento del cigueñal. No podemos permitir que el carter sufra por un mal desmontaje. Lo que hacemos es dilatar el aluminio del carter y facilitar la salida del rodamiento sin dañar el alojamiento del mismo.. Con un martillo de nylon puede ser suficiente para separar, aunque lo correcto seria utilizar un extractor a tal efecto.



Ya lo tenemos separado...





Ahora toca calentar el otro lado para desmontar el cigüeñal. Todo el procedimiento recomendado es igual que en los motores clásicos. Ha de salir con el rodamiento unido al cigueñal y extarerlo con un giro.



Aquí lo tenemos. Está todo muy seco. Lo que han sufrido estas motos...



Ya solo nos queda separar la caja de láminas.




El siguiente paso será examinar las pocas piezas que se van a aprovechar. Y limpiar, claro.

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